Londres 38: Memoria Construida #3

#3 LONDRES 38

Centro de Detención, Tortura y Exterminio

 

La guerra sucia de Chile tiene su Memorial. En Santiago de Chile, en la calle de Londres No. 38, existe un inmueble donde se aprisionaron un número indeterminado de “disidentes” y se hicieron desaparecer, o ejecutar, a al menos 96 personas. Fue la sede de la DINA, o Dirección de Inteligencia Nacional, antes de eso una sede de comunal del Partido Socialista chileno. En 1978, por decreto de Augusto Pinochet, el edificio quedó como propiedad de un instituto privado con fuertes ataduras al poder militar chileno, cerrando así las puertas de su memoria.

 

En 2006, dicho instituto intentó subastar la propiedad, causando que la sociedad civil clamara la recuperación del mismo y encendiendo la memoria de sus víctimas. Durante los siguientes años, en un forcejeo entre civiles y gobernantes, se instauraron mesas de trabajo para redefinir el uso del edificio, pues las propuestas abundaban y se encontraban en conflicto. Las mesas de trabajo determinaron que Londres 38 tendría que resignificarse en un espacio que contribuyera a la construcción de las memorias relacionadas con aquel lugar, apoyar y estimular los procesos individuales y colectivos de elaboración, transmisión y transformación de la memoria, en fortalecer las redes sociales que contribuyan a la producción de nuevas expresiones de la memoria colectiva, en conservar el inmueble de Londres 38 y bienes relacionados, y finalmente, en educar en materia de derechos humanos.

 

El anteproyecto arquitectónico seleccionado fue cauteloso de no alterar la estructura del inmueble, permitiendo así que narrara su memoria, así como la intervención del pavimento adoquinado frente al mismo, reemplazando algunas piedras por placas que tienen grabadas los nombres de las víctimas, y por baldosas de mármol blanco y granito negro inscritas con testimonios de los sobrevivientes de la DINA. Como parte de la estrategia de opacidad del gobierno de Pinochet, el número 38 se había sustituido por el número 40 – el proyecto plantea colocar frente al número 40 al número 38 original, trayendo a luz las intenciones e historia del sitio. Finalmente, se colocó una placa a un costado del acceso del inmueble, narrando la memoria a los visitantes y transeúntes.

 

Lo que interesa del caso de Londres 38 es que es un memorial que remite a la guerra sucia, que fue un fenómeno endémico a Latinoamérica durante la segunda mitad del siglo XX. Asimismo, es un memorial que logra recuperar el sitio original, con toda su carga histórica y dolorosa, para honrar a sus víctimas y perpetuar su memoria. La recuperación del sitio original donde se perpetraron los derechos y las vidas de las víctimas es un trabajo que requiere la sanción del gobierno, suceso que comunica una voluntad del mismo por reparar el daño y construir la justicia. Destaca también el proceso que se llevó a cabo para recuperar y determinar el uso y forma del sitio, haciendo de ello un caso ejemplar de democracia. Finalmente, Londres 38 es posible gracias a una activa red virtual de participantes que continuamente narran los hechos que ocurrieron allí, haciendo una labor de proteger los derechos humanos de los chilenos que hoy viven.

 

 

Las baldosas fuera de Londres 38. Foto por Colectivo Londres 38

Las baldosas fuera de Londres 38. Foto por Colectivo Londres 38

 

 

pd. Londres 38 es un caso nada disimilar a la Plaza de Tlaxcoaque de la Ciudad de México. Aquí un texto de Jesús Robles Maloof como precedente a un posible estudio e intervención en aquel espacio.

One response to “Londres 38: Memoria Construida #3

  1. Cuando estuve en Argentina -y lo comento porque es un caso similar- me impresionó mucho que en varios lugares de Buenos Aires hay incrustadas en el piso placas con un marco colorido que dice más o menos: ” en este lugar vivía tal o tales personas y fueron detenidas ilegalmente en tal fecha, y hasta la fecha está desaparecida” era imposible pasear por Buenos Aires sin tener presente la memoria de esa tragedia que continúa viva.

Leave a comment